Ecco, ce l'ho fatto. Por fin una buona cena a la italiana: ricotta, mozarella (burrata), marmellata di fichi. Prosciutto crudo e salumi. Melone e pomodori.
Certo, habrà gente que piense "vaya una cena pobre". "Vaya una cena tonta", "nada de cocinado", " ?esa es la cocina italiana?" o "eso lo hay en todas partes". Se equivocan.
Vale, el jamòn serrano. El jamòn espagnol es diferente, ùnico, hasta mejor. Tiene sin duda màs sabor, eso no lo niega nadie. El italiano es menor, màs suave, màs insìpido, claro, aunque... sì, es distinto. No lo cambio por el ibérico, 100% bellota, pata negra... pero el de aquì no està mal. Es màs para acompagnar. Como para comer con algo. No es el plato exquisito al que estamos acostumbrados pero es otra cosa y se gusta con alegrìa.
Los embutidos... vale, que el chorizo, que la morcilla, el salchichòn de la sierra, el morcòn, la butifarra. Pero aquì no estàn mal. Aquì son màs frescos, màs sutiles, màs suaves. No tienen el sabor, potente, de los de Espagna, son màs para comer que para encantar, claro que son también màs digestivos.
El melòn, la mermelada, esas cosas también las tenemos. Pero los quesos... los quesos frescos... sì, los quesos frescos. La mozzarella, il primio sale, la ricotta!!! Non ce la faccio, me faltan. Se dice en el yoga que el queso es sattvico, alimento vivo, porque no està muerto, da energìa. Ni excita ni irrita ni cansa ni atonta: da sensaciòn de bienestar, abre la mente y el alma. El queso fresco es un alimento maravilloso, rico, delicioso, y sobre todo tonificante. Porque està vivo. Porque contiene la esencia de la felicidad, los fermentos, los cuajos, las bacterias que se asientan en nuestro intestino y nos hacen funcionar bien, como el yogurt, el recién hecho. Y en Italia los quesos frescos son los mejores, no sòlo por ser los mejores sino porque hay tantos, y tan distintos, y se consumen tanto... que m'encantan.
giovedì 18 giugno 2009
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1 commento:
Aahhhhmm.. la comida italiaaana! La paaasta! Tambiñen soy fan.
Hace poco estuve en Bérgamo y Verona y el lago d'Iseo, pero no tuve suerte "gastronómica". Eso sí, el resto de maravilla.
Tendré que darme otra vuelta por la bella Italia para recuperar esa tarea culinaria pendiente.
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